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miércoles, noviembre 30, 2011

LAS FALDAS DE MI TIENDA - JAVIER REVERTE

Fotografia Juan Manuel Castro Prieto




He de añorar, hasta la hora de mi muerte,
una manta en el suelo,
en soledad, bajo la falda de mi tienda,
soñando una mujer que, tendida a mi lado,
pinte una sonrisa alegre entre sus labios
y admire, como las madres justas y burlonas,
la torpeza infantil de mis azañas.
Y que luego me abrace y me divierta
como saben hacerlo las hembras descaradas.

Más allá de mi tienda, quiero sentir el pulso
de la montaña vieja que guarda mis espaldas
y notar en mi vientre el viento silbador
que levanta las faldas de mi tienda.
Y escuchar el quejido del búho
y la tos del chacal,
los pasos tenebrosos de la noche
donde no somos nada o quizás somos todo.

Pues la noche es angustias,
recuerdo de tus muertos, dolor de tus fracasos.
Pero es ansia también de orgullos necesarios,
la altivez de tu casta y el trono del valor.

Anhelo ese instante íntimo del miedo,
en soledad,
cuando busco coraje donde sólo hay abismo,
donde me crezco hombre
mientras aúlla el viento bajo el cielo de piedra
y levanta las faldas de mi tienda.
Noches al fin y al cabo,
noches que nos dominan, las noches victoriosas,
noches que se detienen desde el final del tiempo,
noches que nunca engañan,
noches en duermevela en las que a nadie debes
y nadie, al mismo tiempo, a ti te debe nada.

Y  gime el "haboob" *, lúbrico:
trae lamentos lascivos,
susurros sin palabras
que levantan las faldas pudorosas de mi tienda
y me dejan desnudo bajo la noche brava.


Las faldas de mi tienda - Poemas africanos - Javier Reverte (Wadi Halfa, sudán 2000)



*Viento del desierto que arrastra arena.

domingo, noviembre 27, 2011

Vivaldi-Orlando Furioso "Sol da te..." aria di Orlando-Jaroussky-Spinosi...



"Sólo de ti, mi dulce amor, este corazón tendrá paz.
Tus hermosos ojos dulces son las estrellas con que el amor me guía hasta el puerto."

EL REY Y EL HADA*


Erase una vez un rey que vivía muy solo. Y un día el rey estaba tan solo, tan solo, que le iba a contar un chiste a uno y se le había olvidado que sólo vivía él, así que se fue a la cocina y se preparó un café. Total que como no podía contar chistes se fue a dar un paseo por el jardín y hasta que vio un hada.
Y  le dijo el hada: ¿Qué haces aquí?.
Y le dijo el rey: Y tú ¿qué haces aquí?
 Y le dijo el hada: Pero si tú eres el que me ha encontrado.
Y le dijo el rey: Ya lo sé, ¿pero por qué hay tanta luz aquí?
Y  le respondió el hada: Porque soy un hada.
Ya lo sé, le dijo el rey.
Así que no le hizo caso y continuó el camino y se encontró otro castillo y entró.  No había ninguna persona. Y se cayó porque era plano el castillo y, de repente, se encontró en otro castillo. Estaba todo lleno de reyes y reinas y eran estatuas de colores; pero había un rey y una reina que eran de verdad. Así que se volvió a su castillo pero estaba el hada y pasó corriendo por donde estaba el hada y no podía hacer que le viese el hada, porque si no tendría que hablar con ella y no quería. Así que se fue al castillo. Y se tomó un té.
FIN

*(Cuento escrito al dictado de su creador, tal y como salía de su boca de cinco años )

domingo, noviembre 13, 2011

EL ÚLTIMO VIAJE DE STEVE

A las pocas semanas de su muerte, Steve seguía deambulando por las habitaciones de su casa. Le extrañaba la expresión de la cara de su esposa al cruzarse con ella por los pasillos. En la cama ocupaba su lado, pero ella parecía evitarle. Algo nublaba el pensamiento de Steve y le impedía profundizar en las sensaciones que le aturdían. Sólo consiguió asumir su nuevo estado, al posar el dedo índice en la pantalla de su iPhone4, para intentar desbloquearlo. Al deslizarlo de izquierda a derecha el artilugio no reaccionó. Tuvo claro que era su cuerpo astral el que llevaba semanas ocupando el hogar de su viuda. Obviamente su "criatura" se habría encendido, si el índice que la pulsaba hubiera pertenecido a un humano vivo.

domingo, noviembre 06, 2011

SHAKESPEARE- SONETO


William Shakespeare 1564-1616


Si la muerte domina al poderío
de bronce, roca, tierra y mar sin límites,
¿cómo le haría frente la hermosura
cuando es más débil que una flor su fuerza?

Con su hálito de miel, ¿podrá el verano
resistir el asedio de los días,
cuando peñascos y aceradas puertas
no son invulnerables para el Tiempo?

¡Atroz meditación! ¿Dónde ocultarte,
joyel que para su arca el Tiempo quiere?
¿Qué mano detendrá sus pies sutiles?
Y ¿quién prohibirá que te despojen?

Ninguna, a menos que un prodigio guarde
el brillo de mi amor en negra tinta.


William Shakespeare

viernes, noviembre 04, 2011

PARADOJAS DE LA POLÍTICA


Al abrir el buzón de casa, de entre la correspondencia habitual,
bancos, facturas y publicidad - hace años que no me llega ninguna
carta de familiar,  ni amigo - he recibido el primer sobre con propaganda
de la campaña electoral.
Este hecho no dejaría de ser algo habitual en estas fechas, si no
fuera por el partido que me lo ha enviado: IU - CHA.
Teniendo en cuenta que  IU es una coalición de partidos de izquierdas
y ecologistas, me ha dejado bastante perplejo, comprobar como no
tienen reparos en buzonear miles de domicilios en toda  España, con el
despilfarro de papel que esto conlleva.
Por buscar un símil a esta extraña actititud; es como si la iglesia católica,
en la campaña del Domund, en vez de colocarte una pegatina en la camisa
al colaborar con la cuestación, te regalara un condón.


LAS ESTRELLAS - JÜRG SCHUBIGER

Las Estrellas

Hace mucho tiempo, cuando la Madre Tierra todavía ensayaba la Creación, los hombres
tenían flores en la cabeza. Aunque quedaban muy bonitas, sobre todo en primavera,
cuando todos se paseaban con un pequeño prado multicolor encima, a las abejas les
encantaban las flores. Así que los hombres, además de llevar prados en la cabeza como
si fueran sombreros, tenían que aguantar todo el día un enjambre de abejas zumbando a su
alrededor, y por si esto fuera poco, un simple movimiento en falso y, ¡paf!, se les echaban
todas las abejas encima para picarles. Era un fastidio, pero un fastidio de verdad, por eso
los hombres se quejaron a la Madre Tierra.
- Tenéis razón - dijo, no fue muy buena idea.
Les arrancó las flores de la cabeza y las lanzó al cielo con toda su fuerza.
Allí se quedaron, y desde entonces brillan sobre la Tierra, y las conocemos como estrellas.
Los tallos sin flores que les quedaron a los hombres en la cabeza se convirtieron en el pelo.
Hoy en día, todavía se dice que la gente calva, aunque no sepa muy bien por qué, es a la
que más le gusta mirar a las estrellas.

Las estrellas - Así empezó todo - Jürg Schubiger Franz Hohler

martes, noviembre 01, 2011

ROZAR CON MIS DEDOS EL VACÍO



Rozar  con mis dedos el vacío
acercar mis yemas a su hielo
sentado, apoyado
sin apenas peso
leve la respiración
lento el pensamiento
busco sin buscar un rostro
tierna ilusión.
La muerte adherida a la piel
me acaricia celosa
sonríe desdeñosa mostrándome el vacío
la contemplo derrotado
mis manos golpean el aire
inútiles en su intento de sellar la sima.

El reloj da la hora
alguien levanta las sábanas de mi cama
y se mete dentro.